“Apenas pudimos acompletar para todos. La verdad sí están caras las cosas, cada año suben y suben y el sueldo nada, ese sigue igual y así pues no alcanza, pero ni modo, es para educación y el crecimiento de nuestros hijos, todo se hace por ellos”, dice Arturo, quien con tres hijos dice, ahora en estas fechas se las “ve negras” si hace la sumatoria de uniformes, zapatos, útiles, mochilas -más lo que se acumule- para sus tres hijos.

Cuadernos profesionales desde los 20, colores en 50, mochilas de hasta 500 pesos, y ya, en lo que corresponde a uniformes esos van de precios, “algunas cosas como plumas y lápices sí se reciclan, uniformes casi no porque se desgastan pues usan uno o dos para todo el año y además, los niños van creciendo. Aunque sí cada día alcanza para menos”, dice Armida, otra madre de familia que  llegó hasta el centro para comprar al centro de la ciudad y así, ahorrarse unos cuantos pesos.