El obispo, Gerardo de Jesús Rojas López, aseguró que las agresiones y descalificaciones comienzan cuando se acaban los argumentos positivos
Eduardo Beltrán
Cuando se terminan los argumentos estables y maduros, viene la agresividad, opinó el obispo de Tabasco, al ser cuestionado sobre las descalificaciones y agresiones que siempre se hacen unos a otros los candidatos en los debates, en el marco del segundo para aspirantes a gobernador que se celebrará en Tabasco este lunes 13 de mayo.
El monseñor, Gerardo de Jesús Rojas López, abundó: “cuando ya no hay un argumento para exponer, un argumento sano para crecer, un argumento que construye, vienen las descalificaciones”.
Comparó los debates a cargos con los pleitos de niños en las escuelas, que cuando ya no hay diálogo empiezan los golpes.
“Es doloroso que ellos puedan hablar a veces cosas que no se deben ventilar a nivel público, porque son tan privadas y es una falta de respeto”, dijo Rojas López.
En este sentido, hizo un llamado a la cordura y que cuiden su manera de hablar.
MADRES MODERNAS DEBEN CUIDAR A SUS HIJOS
El obispo de Tabasco, Monseñor Gerardo de Jesús Rojas López, aseguró que hoy en día las madres deben seguir con su rol de siempre, de dar vida, de proteger, alimentar, cuidar, y defender a sus hijos.
“Así como las madres quitan de la boca objetos a sus hijos que pueden dañarlos, así hoy deben de saber que si hay una red (red social, internet) que está pudriendo el alma y envenenando el corazón, pues debe quitársela”, respondió el monseñor al ser cuestionado sobre el nuevo papel que juegan las madres modernas cuando los jóvenes pasan gran parte del día con sus teléfonos en redes sociales. Y agregó: “que va a respingar, aunque ya esté grande y viejo, quíteselo”.
Aseguró que, si de verdad las madres aman a sus hijos, deben hacerles un bien; y puso de ejemplo lo suscrito en la “carta a los hebreos”: “el castigo le duele más al padre que al hijo, pero hay que hacerlo”.
Comentó que si se percibe que el hijo tiene una relación que no es buena (con las redes sociales), que le va a echar a perder toda la vida, pues hay que defenderlo. “Las madres tienen el mejor alimento, y cuál es, el amor, la ternura, la comprensión”, añadió.
